Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle. (Mateo 2:1-2)
En Puerto Rico, así como en los demás países latinoamericanos, celebramos el Día de Reyes, en conmemoración de la visita que hicieran los Magos de Oriente al niñito Jesús en Belén.
Así lo celebré de niña
Cuando era niña, la tradición de mi hogar comenzaba desde el 5 de enero, víspera del Día de Reyes. Ese día debía recoger grama, pasto, hierba, del patio y echarla en una caja de zapatos. El propósito de esto era proveer alimento a los camellos de los Reyes Magos cuando visitaran el hogar.
Debía dormirme temprano para que así, durante la noche, los Magos visitaran mi casa y dejaran regalos para mí. Así como sucede de Nochebuena al día de Navidad.
Recuerdo una mañana del Día de Reyes cuando, al despertar, vi todo el pasto regado por todo el piso y no en la cajita, como lo había dejado en la noche. Mi mamá me dijo que había sido que los camellos no sabían comer con la boca cerrada y regaron el piso. Estaba súper sorprendida, y con esa inocencia infantil, me tocó barrer mientras pensaba en lo maleducados que eran los camellos… ¡Recuerdo inolvidable!
Día de Reyes, día familiar
Lo que se repite en cada país cuando se habla de celebrar el Día de Reyes es la unión familiar. Se reúnen las familias para cenar y compartir. En muchos pueblos se celebran cabalgatas, marchas y procesiones, pero en todos siempre está el compartir familiar.
El origen del Día de Reyes es recordar cuando los Magos de Oriente fueron a donde había nacido Jesús para adorarle y ofrecerle regalos. Hoy día lo recordamos en familia con cenas, regalos y eventos de pueblo.
¿Cómo celebras el Día de Reyes?